Nunca antes había pasado tanto frío como aquella mañana, en medio del bosque. Con la nieve por las rodillas. Todo estaba en silencio, solamente se oía de vez en cuando a algún pájaro carpintero martilleando en el tronco de los árboles con su pico, buscando comida. ¿Quién no lo hacía en aquellos días? El crepitar de las llamas producía un extraño eco. Siguiendo el consejo de mi familia y mis vecinos, estaba quemando el uniforme. Los papeles, sin embargo, los había guardado en lugar seguro y secreto.
Categoría: Francia
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