
Dadme una naturaleza salvaje
«Deberíamos partir en la más corta caminata, tal vez, con el espíritu de la aventura eterna, para no regresar jamás; preparados para enviar de vuelta nuestros corazones embalsamados solamente, como reliquias a nuestros reinos desolados. Si estás dispuesto a dejar padre y madre, y hermano y hermana, y mujer e hijo y amigos, y no volver a verlos jamás; si